Un mal momento para el ahorrador conservador
¿Es realmente necesario asumir riesgos con nuestros ahorros? Los bancos aseguran que esto es algo necesario y rentable, pero no es algo aconsejable.
Hasta hace poco, era fácil rentabilizar los ahorros: los intereses correspondientes al capital que se tenía asegurado eran recibidos periódicamente.
El Fondo de Garantía de Depósitos garantiza que en caso de quiebra del banco, cuando se llega a los 100.000 en esa entidad, hay un periodo de medio mes para el reintegro del capital total. Si la cantidad supera esta cifra, lo aconsejable es poner esos ahorros en entidades diferentes o a nombre de otros titulares.
La rentabilidad de los depósitos está bajo mínimos, tanto que no son pocos los que hablan de “cobrar” por esos depósitos y las imposiciones. Es tal la situación, que incluso el “bund” alemán, el activo financiero que sirve como referencia en la medición de la prima de riesgo en cada país, tiene ahora mismo una rentabilidad negativa. Además, el euríbor está en un valor negativo, al igual que las letras del Tesoro.
Por todo esto, los bancos aconsejan asumir riesgos cuando se trata de rentabilizar unos ahorros a través de algunos de sus productos: planes de pensiones, fondos de inversión… Hay que tener en cuenta que tanto la renta fija pública como la privada oscilan, no tanto como la renta variable pero aún así hubo puntos realmente críticos hasta ahora. ¿Recordáis cuando España estuvo al borde del rescate?
Invertir en un plan de pensiones, por ejemplo, no supone olvidarse completamente de lo que sucede en el mercado. Los vaivenes puede suponer en algún caso perder ese tratamiento fiscal ventajoso por la valoración de mercado de sus propios derechos consolidados.
¿Sabes qué es un depósito híbrido? Muchas veces ofrecen esta alternativa porque el rendimiento se vincula a posibles revalorizaciones de una cesta de empresas. Pero con eso se acaba dependiendo de cómo evolucione la bolsa y estas posibles revalorizaciones muchas veces nos dejan como al principio.
Invertir los ahorros en bolsa, salvo que se quieran asumir riesgos porque el capital tiene cierta envergadura, no es para nada aconsejable para un ahorrador conservador. Estarás en una constante incertidumbre. Y si aún con todo esto, ves un ápice de esperanza en la inversión inmobiliaria, has de saber que también puede acarrear problemas: falta de liquidez, una posible burbuja inmobiliaria a la vista…
¿La conclusión? Para estar tranquilo en cuanto a nuestros ahorros asegurados, solo podemos intentar que el capital no disminuya y olvidarse de obtener rendimientos a cambio.
Andrés Iglesias, asesor fiscal en INTER Asesoría, nos habla de esto en su nuevo artículo para Diario de Arousa. Puedes acceder a él haciendo clic aquí.